Aunque es esencial proteger la piel durante todo el año, durante el verano debemos prestarle especial atención debido a la mayor exposición al sol.
La exposición excesiva sin protección puede tener efectos perjudiciales a largo plazo, como la aparición de manchas y arrugas, el aumento de lunares, quemaduras, cáncer de piel y problemas oculares. Para evitar estos riesgos, es crucial recordar aspectos básicos que a menudo olvidamos mientras nos exponemos al sol.
A continuación, te ofrecemos algunos consejos para que los tengas en cuenta durante esta temporada de verano.
EL PROTECTOR SOLAR, TU ALIADO
El protector solar no debería ser un acompañante exclusivo de tus días en la playa; más bien, su uso, especialmente en el rostro, debe formar parte esencial de tu rutina diaria de cuidado de la piel. Antes de exponerte al sol durante esta temporada de verano, asegúrate de resguardarte con una crema solar apropiada para tu tipo de piel.
Además, recuerda realizar retoques cada 2 horas para mantener una protección efectiva.
HIDRATACIÓN CONSTANTE
Es esencial mantener la piel hidratada en todo momento, especialmente durante estos meses. Asegúrate de tener siempre a tu alcance una botella de agua y de incorporar en tu dieta productos de temporada que brinden una mayor hidratación al organismo, como la sandía, naranjas, papaya, frutos rojos o incluso jugos verdes.
Ten presente que una alimentación adecuada también desempeña un papel crucial en el cuidado de la piel, y las frutas se convierten en tus aliadas indispensables durante el verano.
EVITA LAS HORAS DE MAYOR RIESGO
Durante el período comprendido entre las 12 y las 16 horas, la radiación solar alcanza niveles elevados en la tierra. Se recomienda limitar el tiempo de exposición al sol y evitar estar al aire libre durante estas horas críticas. Además, puedes añadir una capa adicional de protección utilizando accesorios como gorras, sombreros y ropa que cubra adecuadamente, pero que al mismo tiempo sea ligera para brindar protección sin generar calor excesivo.
LIMPIEZA, EXFOLIACIÓN E HIDRATACIÓN
Además del cuidado que proporcionamos a la piel antes y durante la exposición al sol, es crucial prestar atención a la rutina posterior. Limpiar minuciosamente nuestra piel, realizar una exfoliación para garantizar la eliminación de células muertas e hidratarla correctamente son pasos esenciales que contribuirán a su bienestar durante el verano. Estos hábitos no solo preservarán la salud de la piel, sino que también promoverán un aspecto más equilibrado y hermoso.
A lo largo de todo el año, pero especialmente en estos meses, es vital estar atentos al estado de la piel y a cualquier cambio que pueda experimentar. Optar por medidas de cuidado es esencial para prevenir posibles consecuencias a futuro.
Recuerda que en Bioestimulación contamos con los tratamientos adecuados para restaurar la hidratación que tu piel perdió durante los días de verano, permitiéndote comenzar el año con un aspecto renovado.
Dr. Emmanuel de Souza Leal
Especialista en Medicina Estética
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